sábado, 2 de mayo de 2009

Me cuesta la poesía que no avanza (Pendejadas, 2007)

Me cuesta la poesía que no avanza,
que se queda en hipérbole y metáfora,
mentira depositada sobre otro cuento.
Y tú, maraña de nadismos revueltos,
cobardía de no partir por el principio.
¡Qué bien luce llamarse Hiperbatón!

Anáfora, monstruo de siete cabezas,
sinestesia, pesadilla de mi infancia.
Ay, celosas guardianas avarientas,
ay, fariseas amantes de las reglas,
ay, cuán grande será su castigo,
porque no entran ni dejan entrar.

Rima, desde aquí proclamo tu muerte,
me pasearé con tu cabeza en una lanza,
gritaré por las ciudades que te has ido,
que tu viejo amigo el ritmo se ha rendido,
ha preferido vivir en una isla desierta
y reconocer que yo, ignorante, le gané.

No hay comentarios:

Publicar un comentario